Contratos temporales

Guía para realizar contratos temporales de forma adecuada

¿Cuándo es apropiado realizar un contrato temporal?

Los contratos temporales son una herramienta fundamental en el ámbito laboral, permitiendo a las empresas gestionar situaciones específicas y cubrir necesidades transitorias. Sin embargo, es importante conocer cuándo es adecuado utilizar este tipo de contrato para evitar posibles problemas legales. A continuación, te explicamos las circunstancias en las que se justifica la celebración de un contrato temporal:


Por circunstancias de la producción.

Este contrato debe realizarse cuando exista una necesidad o incrementos ocasionales imprevisibles de la producción u oscilaciones de la demanda (incluidas las vacaciones), por un tiempo máximo de seis meses, ampliables a doce por convenio colectivo sectorial. También podría ser utilizado en situaciones previsibles tales como: cursos de formación, campañas agrícolas, en rebajas, campañas navideñas, y otros, por un periodo máximo de 90 días al año no consecutivos.


Por sustitución de la persona trabajadora.

Podrá ser celebrado para la sustitución de una persona trabajadora con derecho a reserva de puesto de trabajo; para completar la jornada reducida por otra persona trabajadora, cuando dicha reducción se ampare en causas legalmente establecidas o reguladas en el convenio colectivo y para la cobertura temporal de un puesto de trabajo durante el proceso de selección o promoción para su cobertura definitiva mediante contrato fijo, sin que su duración pueda ser en este caso superior a tres meses.

Debe tenerse en cuenta que de no cumplirse estos requisitos y hacerse un contrato temporal sin cumplir alguna de las circunstancias detalladas anteriormente y si tuviera una inspección de trabajo, este contrato puede considerarse en fraude de ley y solicitar a la empresa su transformación a contrato indefinido.

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